La noche en el jardín
Una pequeña música nocturna
en forma de viento.
Los chicos cazan luciérnagas
y ponen las manos
como para rezar.
Como si Dios fuera una luciérnaga
y se dejara atrapar
para romper el silencio.
Como si el milagro fuera que Dios
sea una luciérnaga
para no sentirnos
tan
solos.
Borderline
Quería
caminar el silencio,
el
delicado filo de las cosas.
Tenía
nueve años mi voz.
Quería
caminar.
Atadas
las piernas y los brazos,
quería
caminar.
Quería
irme lejos,
el
delicado filo de las cosas,
caminaba,
adonde
sea.
Mis
pies se cortarían y yo
caminaría
tratando de huir.
Quería
caminar el silencio,
atravesar
una puerta que no existe.
El
invierno es propicio
para
que caiga la nieve
en
forma de poema.
La
nieve cae sobre mi piel.
Me
incendio.
Quería
caminar el silencio.
Tenía
nueve años mi voz.
Quería
dormir en el silencio
y
que alguien me caminara.
Madre–Sonido.
Cuerpo–Ceniza.
Tenía
nueve años
mi
voz
cuando
las palabras
me
comenzaron a desaparecer.
Retrato de Enrique 6:00 AM
Estoy
aquí
esta mañana,
mientras
afuera los autos
atraviesan
el mundo.
Como
si no tuviera importancia
yo
quiero decir
la noche,
pero
en esta mañana es imposible.
Afuera
los autos vienen para irse
al
mismo tiempo que el sol
pesado
se levanta
para
mostrar que yo no voy
en
ninguno de ellos.
“La
realidad, la sombra de la realidad,
el
gesto de la fuga es la realidad”,
digo,
sentado
en mi cuerpo de escritor,
mientras
me miro en el espejo
y
pregunto “¿quién soy?,
¿quién
me creo que soy?”
Entonces,
igual
digo la noche esta mañana,
me
paso la crema de afeitar
y
no termino
hasta
ver en mi cara