lunes

el año que se fue

Dentro de todas las cosas que hicimos el año pasado, las fechas del "Viernes de Letras", y el "II Festival de Poesía de Lima", fueron los eventos más importantes. Aquí dejamos unas fotos, ampliaremos más adelante.




El micrófono y mi voz para comenzar los recitales, gracias por soportar mi voz y mis preludios.








Uno de los eventos más hermosos del ciclo, el librero Ángel Duclos (hablando) le entrega el manuscrito que encontró el "El saber de las rosas", al poeta Enrique Verástegui. La leyenda dice que Enrique perdió el libro, por confiar en un editor inexperto. Duclos, encontró el manuscrito en "la cachina", un mercado de recicladores y lúmpenes.


Sofia Victoria Lino, desde Argentina, realizó una perfomance en la Plaza San Martín, en el marco del II Festival de Poesía de Lima.



Uno de los poetas más importante de la lengua castellana, el uruguayo Roberto Echevarren, leyendo en el Yacana Bar. Octubre del 2011, en el II Festival de Poesía de Lima.

Víctor Vimos





Vimos es un joven poeta ecuatoriano (de una generación prólifica y de acción) que viene desarrollando una obra constante y que ha viajado buscando estrechar lazos en la región.




Nacido en Riobamba, en 1985, es miembro fundador del Proyecto editorial Matapalo Cartonera; ganó en Segundo Premio Provincial de Poesía (Chimborazo, 2004); Premio Nacional de Cuento "Bienal Juegos Florales" (2007).



Ha publicado Perinola (Noctambulario Ediciones, 2007); Prolongaciones (Casa de Cultura Ecuatoriana, 2010); Dragón (Sarita Cartonera, 2010). Participó del II Festival de Poesía de Lima (2011).




Transcribimos un extracto del libro Desfiguraciones (Nulu Bonsai, Red Editora, 2010). Un largo poema que nos muestra el paladar y el corazón de Vimos.



(...)




la francesa no se parecia a vos

chillaba
y le encantaba taparse la nariz

con una cascada de aguijones blancos

era un billete de cien que me abría

las puertas de los cinemas

las mesas de las cantinas

los tonos envenenados de las rocolas

las serpentinas de sus piernas







vos no te pareces a la francesa

no planeé nada de esto

me encantaba acurrucarte en mis brazos

y tocar las cuerdas de arpa

templando el aliento a música triste

que traían tus ojos

yo podía ser una piedra entonces

golpeándome contra todas las cicatrices del mundo

para hacer más extenso el desenfreno de la vida

ahora soy un fósil

una palabra extrañada que lastima el paladar

un animal con cuarenta somníferos

dispuesto a matarse mil veces

para acallar el griterio que inunda mis sienes

esto es un juego



mira

los somníferos son bolitas blancas

escupitajos de las aves en el suelo

caramelos

puertas pequeñas por donde fuga el miedo a perder







no planeé nada de esto

uno despierta un día y se ve arrojado a las aguas

como un reptil desahuciado

arrojado a las aguas oscuras de la noche

y le crecen garras

cola

colmillos

espinas en las vértebras

y la gente se destroza los dedos queriendo calmarlo

no me calmo un carajo

un escarabajo

un gargajo

es lo que tengo dentro de las orejas

y vienen las gaviotas a cagar la sal del mar

en el cementerio que reposa en mi pecho



Víctor Vimos

martes

Las ardillas del Orden Enano


Fue en la última Feria del Libro de Lima, donde trabaja y me perdía todas las actividades, que tuve acceso a este libro.


El amigo chileno, Nico Leiva, me mandó un e-mail diciendome que en el stand de Ecuador, habían unos libros para mi; Luis ALberto Bravo, autor del libro, le envió algunos para repartirlos en el Perú, y Nico pensó en mí para repartir ese libro. Se lo di a algunos amigos y guardé un par para enviarselos a Nico, a su natal Chile.


La lectura de este libro, lo leí de un tirón, me hizo recordar a esas propuestas narrativas tan intrépidas y divertidas de Boris Vian, si bien el humor negro no es una de las características de LAS ARDILLAS DEL ORDEN ENANO (El Quirófano, Ediciones, 2011), el riesgo que ha tomado Bravo para tratar de darle una vuelta de tuerca a la joven narrativa sudamericana, es gratamente interesante.

"El Chismografo" o "Slam" (como se llama en Perú); la ciudad hecha de pedazos de otras, la música de fondo, los grupos de personas que representan estereotipos, los estereotipos que nos muestran individualidades; el uso del guión de teatro, los dibujos, el caligrama, la brevedad de libro que así como se abre hacia todos, se cierra sin cerrase completamente y uno puede ser parte de la historia y alterar el texto.


Me hubiera gustado ampliar más los escenarios de los "árboles epilépticos", o la historia del elfo que alimentaba a las ardillas.


Pera estás son solo impresiones. Mejor trancribimos un texto sobre el libro.


"Es muy raro que me guste algo de verdad. Escribir más o menos bien es fácil, bien fácil, lo difícil es ser distinto. Toda buena novela crea un mundo, es este caso el mundo de las Las Ardillas del Orden Enano. Los momentos que el autor logra escapar del tiempo y de los espacios comunes son lo más llamativo de su obra. Lo que importa es reinventarse a sí mismo y a la literatura. Va en buen camino."

María Alzira Brum