DAÑO Nº 18
Creer que estás embarazada
Querer sexo (querer que quieran sexo
contigo) pero pasar el viernes sola
Ponerte en el pellejo de la hermana de
Celan
que nunca apareció
Ver llorar a un anciano
que ha visto un reportaje en la
televisión pública
sobre el abandono de ancianos; su
triste párpado de repente
chasquea
Ir al ginecólogo y decir
creo que estoy embarazada
Desmayarte de nervios y dolor; el
doctor te hipnotiza
con su insulto feroz: “no sé por qué,
querida,
te duele tanto este dilatador: es
para vírgenes”
Decirle a tu madre
he ido al ginecólogo
porque creía que estaba embarazada
Ah, ¿ya mantenéis relaciones sexuales
completas?
Y sin precauciones, estoy decepcionada
Ver que tu madre está decepcionada, tu
madre está
decepcionada
Ponerte en el pellejo de Celan
que jamás encontró a su hermana
imaginaria
Ponerte en el pellejo de Gisèle porque
Celan intentó estrangularla porque
jamás encontró a su hermana
imaginaria
Querer gustarle pero él te dice
si quieres vamos a mi cuarto o a tu
cuarto
Lleváis apenas 10 minutos
con los besos no te fías
de él
Querer sexo pero no fiarse
Ah, ¿pero querías algo auténtico?
Y sin precauciones, estoy decepcionado
Me dijiste que tenías el corazón atado
al tobillo
Lo siento lo solté un momento me dormí
y se me escapó
Es un desobediente
Muy mal muy mal pídele perdón al chico
Perdón
chico
La edad de merecer (La Bella Varsovia, 2015)
poema sobre mirar el cielo de noche y pensar muchas cosas
yo que opino que la hipermetropía es una manera
legítima de existir y que intento ser buena persona y que estudio mucho ética y
metaética y yo que lloro mucho con david hume y con los galgos maltratados y
con los viejos maltratados y con la contaminación de las heces de las gallinas
y sus obscenas celdas del tamaño de un folio A-4 y sus viscosas fiebres del
tamaño de un subcontinente y yo que creo en los tirabuzones de los páramos y yo
que ignoro todo y que me pregunto qué hacer con el mundo y su cabello cardado y
reseco y cómo tocar sus huesos arcaicos y su praxis y el humo de su belleza
impenetrable y yo que siempre siento la presencia de un muro fratricida del
sabor umami de la leche cuando quiero verter una palabra amable y desaliñada en
la gorra entreabierta del mendigo y yo que sé bastante del amor y que lucho
aunque con sueño o con sueños excesivos a favor de la pandemia global de perdón
y de esperanza y de cursilería que arrase el planeta tierra tal y como lo
desconocemos de una vez por todas y yo que sueño excesivamente sueños de
carácter excesivamente erótico y a veces perverso y abrupto y que nunca le
perdonaré a mi especie auschwitz el dinero el niño muerto y yo que olvido mucho
y que propongo encender una vela con todos vosotros juntos para recordar todos
nuestros olvidos y yo que hurgo en la ranura del logos y no encuentro nada y yo que tengo un progenitor A y un
progenitor B y un hermano y una hermana y yo que aun así ignoro todo de la
muerte y me pregunto qué cantar cuando anochece y qué cantar que no insulte al
famélico o al translúcido o a la mujer bajo las piedras del odio y yo que
tirito con virginal desasosiego en el instante crítico de tener que elegir
color favorito yo me río un poco con envidia, un poco con amargura, sí, un poco
con resentimiento, me río de la seguridad ontológica del hombre medieval, sus
ojos tranquilos, enternecedores
La edad de merecer (La Bella Varsovia, 2015)
CUESTIONARIO PRE-MATRIMONIAL
¿Nos vamos a vivir a un falansterio?
¿Has perdido mucho el tiempo?
¿Escribir libros tristes es adaptativo?
¿No hay cuerpo que no sea, a largo plazo, música?
¿Te drogas? ¿Crees en algo? ¿Eres salvaje? ¿Eres anarquista?
¿Teísmo, flechas, ritos, pasos?
¿Estrías, ascuas, teína, ateísmo?
¿Has resbalado por el páramo con una décima de fiebre?
¿Ríes a carcajadas por el páramo con una décima de fiebre?
¿Escuchas el silencio histriónico de la palabra harpa?
¿Escuchas el silencio histriónico de todas las palabras?
¿Escuchas el silencio histriónico del imperativo abrázame y,
verbalizándolo, me abrazas?
¿Plagian, pero mal, las palabras a los grajos?
¿Los textos de los cuervos? ¿Los cloqueos-contraseña?
¿Y el vapor, y el pespunte? ¿La diástole, el párpado?
¿Es una herida fresca?
¿Tienes mucho calor?
¿Nihilismo o pétalo?
¿Nihilismo o pétalo?
Inédito
Berta García Faet (Valencia, España, 1988)
Es autora de los libros Los
salmos fosforitos (La Bella Varsovia, 2017), La edad de merecer (La Bella Varsovia, 2015), Fresa y herida (Premio Nacional de Poesía “Antonio González de
Lama” 2010; Diputación de León, 2011), Introducción
a todo (IV Premio de Poesía Joven “Pablo García Baena”; La Bella Varsovia,
2011), Night club para alumnas aplicadas
(VII Premio Nacional de Poesía “Ciega de Manzanares”; Vitruvio, 2009) y Manojo de abominaciones (XVI Premio de
Poesía “Ana de Valle”; Ayuntamiento de Avilés, 2008).